Dune 2, para los que somos lo suficientemente viejos para recordarlo, fue toda una revelación. Lanzado por el ya desaparecido Westwood Studios en 1992, Dune 2 dejó las raíces de juego de aventura plantadas en el título original, para convertirse solamente en un juego de estrategia. Pero a diferencia de la mayoría de juegos de la época, en lugar de utilizar turnos para mover unidades, Westwood decidió cambiar la fórmula, añadiéndole un sentimiento de urgencia al no darnos infinito tiempo para realizar movimientos. Así es, tanto nosotros, como la inteligencia artificial de la computadora, teníamos que realizar todas nuestras acciones de manera simultánea, en tiempo real.
Existieron algunos intentos previos, pero fue Dune 2 el que realmente consiguió fusionar todas las mecánicas en un juego que, para la época, era revolucionario.
Algunas de las mecánicas han sido, por supuesto, perfeccionadas con el tiempo. La idea de tener que construir plataformas antes de poder colocar construcciones puede ser algo lógico pero, en la práctica, no es muy divertido. La posibilidad de controlar múltiples unidades es algo que recién veríamos con Warcraft (de Blizzard), así que aquí tendremos que mover a las unidades de manera individual.
A pesar de estas limitaciones, sin embargo, el juego sigue siendo divertido, y sobre todo, un excelente viaje al pasado; una manera de ver de dónde juegos como Starcraft o prácticamente todo juego de estrategia en tiempo real, tomó inspiración.
Westwood pasaría a crear Command & Conquer, quizás su franquicia más conocida (y que competería directamente con Warcraft / Warcraft 2, otros dos clásicos del género), para luego ser adquirido EA y, lamentablemente, desaparecer.
Pueden jugar Dune 2 desde sus navegadores, desde aquí:
